miércoles, 27 de junio de 2007

Relación de cartas cruzadas con el Colegio de Médicos de Madrid a propósito del despropósito del caso Lamela



CARTA 1.-
PETICIÓN DE INFORMACIÓN SOBRE LA POSTURA DEL COLEGIO.
31 DE MARZO DE 2005

Sra. Presidenta del Colegio de Médicos de Madrid
Sres. Miembros de la Junta Directiva del Colegio de Médicos de Madrid

Muy señores míos:

soy el médico colegiado nº XXXXX, con más de veinticuatro años de colegiación en Madrid y me gustaría fueran tan amables de darme la información que les solicito (remarcaré aquí que en todos esos años de colegiado es la primera vez que me dirijo al Colegio a solicitar algo).

Se trata de lo siguiente: en relación a los acontecimientos ocurridos en las últimas semanas en el Hospital Severo Ochoa de Leganés no ha sido muy relevante ni ha trascendido de manera nítida a los medios de comunicación la postura del Colegio. ¿Cuál es esa postura y dónde ha sido remitida?.

En la página de actualidad de esta página web hay una nota escueta y ambigua sobre el tema. ¿Eso es todo lo que tiene que decir el Colegio de Madrid de este caso? ¿Qué quiere decir exactamente que se apoyan las medidas tomadas por la Administración Sanitaria?

En el periódico "El País" de fecha 29 de Marzo de 2005, en su página 24, entresacado de una noticia sobre este asunto, se pone en boca de una supuesta portavoz de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid el apoyo del Colegio de Médicos de Madrid a la gestión de dicha Consejería en este caso. ¿Ha existido ese apoyo? Si no es así ¿se ha rectificado esa declaración? ¿Dónde y cuando se ha hecho?
A mi entender estamos ante un caso de extraordinaria gravedad donde la defensa de la profesión y de los compañeros perseguidos debe estar por encima de cualquier otro criterio. Estando estos, según creo, entre los cometidos más importantes del Colegio me gustaría saber, y es lo que solicito por medio de esta carta, cuál está siendo la actuación del mismo en este caso.

A la espera de sus noticias que pueden remitirme si lo desean por esta vía al remite de este correo o por correo postal, se despide atentamente,

José Manuel Díaz Olalla
Médico Colegiado de Madrid

CARTA 2.-
CONTESTACIÓN DEL COLEGIO DE MÉDICOS MEDIANTE UNA NOTA DE PRENSA.
31 DE MARZO DE 2005

EL COLEGIO DE MÉDICOS DE MADRID INVESTIGA EL FUNCIONAMIENTO DEL SERVICIO DE URGENCIAS DEL HOSPITAL SEVERO OCHOA

Ante la alarma social creada por las denuncias anónimas acerca del funcionamiento de la Unidad de Urgencias del Hospital Severo Ochoa, el Colegio de Médicos de Madrid manifiesta que la confianza de los ciudadanos en su sistema sanitario es un bien público que debe ser objeto de protección, en la que están implicadas todas las instituciones de la Administración, asociaciones profesionales, de consumidores, de pacientes…, y que es necesario mantener y reforzar esa confianza en los médicos, los centros y resto del personal sanitario que cada día vela por la salud de los madrileños con el más alto nivel de excelencia, y expresamente en el Hospital Severo Ochoa, que tiene a su cargo la atención de una importante área sanitaria.

El Colegio de Médicos de Madrid recuerda que la autoridad judicial aún no se ha pronunciado sobre la existencia o no de delitos juzgables, y menos aún sobre presuntas culpabilidades, por lo que debe respetarse el derecho constitucional a la presunción de inocencia En este mismo sentido se ha pronunciado la Mesa de Hospitales de este Colegio, que rechaza la adopción de medidas precipitadas que dañan irreparablemente el nombre de algunos profesionales.

Por último, instamos a la Administración Sanitaria y a la autoridad judicial para que esclarezca con la mayor celeridad los hechos que han rodeado a la publicidad de este asunto.

El Colegio de Médicos de Madrid, en uso de las atribuciones que tiene conferidas, va a iniciar a través de la Comisión Deontológica las investigaciones oportunas para el esclarecimiento de los hechos.


CARTA 3.-
SOLICITUD REITERADA A LA PRESIDENTA DEL COLEGIO DE MÉDICOS DE MADRID DE INFORMACIÓN SOBRE LA POSTURA DEL COLEGIO.
14 DE ABRIL DE 2005
Sra. Presidenta del Colegio de Médicos de Madrid
Estimada Presidenta:
soy el colegiado nº xxxxx..
Hace unos días le solicité por esta vía información sobre la postura de ese Colegio respecto a la situación que están viviendo los compañeros del Hospital Severo Ochoa y, en su conjunto, todos los médicos de la Comunidad de Madrid. Al no haber recibido respuesta alguna por su parte, mientras continúan las apariciones públicas del Consejero de Salud de la Comunidad de Madrid en los medios de comunicación, la última hace dos días en Televisión Española, arrogándose el apoyo incondicional de nuestro Colegio a sus medidas, una gran parte de los colegiados estamos llegando a pensar que, efectivamente, el Sr. Lamela goza del apoyo del Colegio en sus arbitrariedades contra los médicos madrileños.
Si esto fuera así estoy seguro que nos obligaría a muchos de nosotros a plantearnos qué hacemos en un Colegio que no defiende nuestros derechos profesionales y agacha la cabeza ante cualquier medida arbitraria que la administración pueda tomar contra nosotros.
Le reitero me comunique por la vía que considere más oportuna en dónde y cuándo el Colegio de Madrid ha desmentido las afirmaciones del Consejero Lamela. Si no es así, en la medida de mis posibilidades, no dudaré en generar entre mis compañeros el debate que he dejado planteado en el párrafo precedente.
Atentamente,
José Manuel Díaz Olalla
Médico Colegiado

CARTA 4.-
CONTESTACIÓN DE LA JUNTA DIRECTIVA DEL COLEGIO DE MÉDICOS MEDIANTE NOTA DE PRENSA.
14 DE ABRIL DE 2005

EL COLEGIO DE MÉDICOS DE MADRID

Ante la situación del Hospital Severo Ochoa, expone que:

El Colegio está obligado a velar por la correcta atención sanitaria a los ciudadanos, haciendo que la actuación profesional de los médicos de Madrid sea adecuada a una buena praxis. Al tiempo tiene también la obligación de exigir que se respete el derecho constitucional a la presunción de inocencia del médico implicado, derecho que asiste a todo ciudadano hasta que haya un pronunciamiento judicial firme.

No se está respetando tal derecho fundamental desde distintos ámbitos pues, entre otras cosas, se hizo público desde el principio la identidad del facultativo, con el consiguiente daño personal y profesional, y se ha entrado en un juego político utilizándose la asistencia sanitaria como arma arrojadiza.

La Junta Directiva del Colegio de Médicos de Madrid, en su obligación de buscar la verdad para el total esclarecimiento de los hechos, y para la adopción posterior de las medidas oportunas, encargó el pasado 31 de marzo la correspondiente investigación a la Comisión Deontológica.

El interés único del Colegio de Médicos de Madrid en este conflicto es la búsqueda y consecución de la verdad.

Junta Directiva

CARTA 5.-
CONTESTACIÓN DE LA PRESIDENTA DEL COLEGIO DE MÉDICOS A LA PETICIÓN DE INFORMACIÓN SOLICITADA.
15 DE ABRIL DE 2005

Estimado compañero:

El Colegio de Médicos ha mantenido desde el principio del conflicto de Leganés la misma actitud, que es la de reclamar la presunción de inocencia para el Dr. Montes.

Asimismo, y para que esta situación acabe cuanto antes, ha pedido y seguirá pidiendo que se agilicen y realicen con prontitud pero con absoluta justicia, las acciones conducentes a esclarecer la verdad y a actuar en consecuencia.

En este sentido, hemos reclamado el apoyo de la Consejería y la hemos apoyado para que agilice los mecanismos de investigación para encontrar la verdad. Esto es lo único que usted debería haber oído sobre el Colegio. Si ha recibido otra información, no corresponde a lo que ha hecho el Colegio.
No hemos apoyado la manifestación de UGT y CCOO, porque ello no conduce a aumentar la confianza de los ciudadanos en los médicos como ellos dicen, sino que, por el contrario, la deteriora. Convocan una manifestación en apoyo de la sanidad pública, pero prácticamente nunca han apoyado que nos retribuyan económicamente a los médicos de acuerdo a nuestro nivel de conocimientos y responsabilidad. Quizá por ello los sindicatos médicos no la han apoyado tampoco.

Y principalmente, y sobre todo, no les apoyo porque lo importante para ayudar al Dr. Montes es participar en los foros profesionales en el estudio sereno del problema para que recupere el reconocimiento de su total honorabilidad, que es lo que queremos. Después será el momento de actuar en otros puntos.

Ahora el Colegio tiene la obligación prioritaria de buscar y encontrar la verdad para actuar en consecuencia.
Para su información le adjunto, cronológicamente, los comunicados que ha hecho públicos el Colegio desde que empezó la crisis.

Cordialmente
Juliana Fariña/ Presidenta.



CARTA 6.-
CONTESTACIÓN A LA PRESIDENTA DEL COLEGIO EN RELACIÓN A SU CARTA DE 14 DE ABRIL DE 2005 EN LA QUE EXPONÍA SUS PUNTOS DE VISTA SOBRE EL TEMA.
24 DE ABRIL DE 2005
Estimada Presidenta:
contesto a su atento correo electrónico donde expone los puntos de vista del Colegio en relación a algunos aspectos del conflicto del Hospital Severo Ochoa.
Y lamento no coincidir con usted en los argumentos que allí tiene a bien transmitirme. No es mi intención, además de que tampoco es este el formato adecuado, el de polemizar al hilo de sus puntos de vista sobre el lamentable problema del que tratamos. Tan sólo transmitirle mi opinión de que el Colegio de Médicos de Madrid, y ya que usted hace referencia a ellos, también los llamados "sindicatos médicos", han perdido una ocasión extraordinara para demostrar hasta donde están dispuestos a llegar en la defensa de los profesionales y de los pacientes frente a la arbitrariedad y la falta de juicio de la Consejería de Sanidad de Madrid. Habla usted de "lo que yo debía haber oído" en relación a la postura del Colegio, pero lo que yo he oído en realidad, y como yo miles de personas, es al consejero Lamela en televisión decir que su intolerable actuación era respaldada por el Colegio de Médicos de Madrid, al que yo pertenezco y usted preside, y lo que no hemos oído, aunque a muchos nos hubiera gustado, es a la Presidenta del Colegio salir diligente a los medios a decir que tal aseveración era falsa.
En el diario "El País" de hoy día 25 de Abril aparece una carta al director dirigida por un médico colegiado de Madrid llamado Jesús Martínez-Falero, al que no tengo el gusto de conocer. En ella manifiesta su dolor por no haberse sentido defendido, como profesional, por el Colegio de Médicos de Madrid.
Debe considerar que esa sensación, que es la misma que me ha impulsado a mí a escribirle estos correos, es compartida hoy en día por muchísimos médicos de Madrid que nos sentimos profundamente defraudados por la actuación del Colegio y por la suya personalmente.
Yo, como tantos otros compañeros, he vivido casi toda mi vida profesional de espaldas a un Colegio que hemos considerado algo inútil, impuesto y condenado a extinguirse. Reconozco que en los últimos años nos habíamos reconciliado en parte con esta institución profesional a la que observábamos con cierto interés en su progresión hacia algo útil y cercano a los intereses de la mayoría de nosotros, y todo ello gracias a la labor y la gestión de usted.
El caso del Severo Ochoa ha sido para todos estos médicos de los que le hablo y entre los que me cuento el test definitivo. Y el resultado no ha podido ser más desalentador. Hemos vuelto a reencontrarnos con ese Colegio antiguo, rancio, diligente tan sólo cuando se trata de defender los derechos de unos pocos, y dócil y sumiso ante la imposición del poderoso, en especial si se trata de una administración arbitraria como la que sufrimos en Madrid. Un Colegio que no nos gusta y que creíamos ya superado. En todo caso muchos pasos hacia atrás sobre los pasitos que se habían dado.
Lo lamento de verdad aunque quiero agradecerle de manera sincera que haya tenido la gentileza de contestarme. Se lo agradezco y lo estimo en todo su valor porque me imagino la cuantía y trascendencia de sus ocupaciones en estos días.
Quedo a su disposición. Atentamente,
José Manuel Díaz Olalla,
Médico Colegiado


CARTA 7.-
AL COMITÉ DEONTOLÓGICO DEL COLEGIO DE MÉDICOS.
7 DE JUNIO DE 2006

A la Comisión Deontológica del Colegio de Médicos de Madrid

Estimados compañeros:
me dirijo a esa Comisión para manifestar al Dr. Casares mi solidaridad más incondicional y expresa por la digna decisión que ha tomado en relación al vergonzoso informe político que ha elaborado la comisión escogida a dedo por la Dra. Fariñas contra los derechos de los médicos y de los pacientes. En este sentido, hace algunos meses escribí una carta a la Presidenta del Colegio en la que le manifestaba mi inquietud por el hecho de que, a mi entender, todos los movimientos que como Presidenta estaba dando entonces (al inicio de la crisis de este caso) iban encaminados a apoyar las intolerables actuaciones de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid contra un grupo de compañeros y contra el Hospital Severo Ochoa en su conjunto. Por desgracia los acontecimientos no han hecho más que refrendar mis impresiones en este sentido.
Al resto de los compañeros de la Comisión os animo a que sigáis el camino del Presidente en la seguridad de que vuestra postura gozará de la comprensión y el apoyo de una gran mayoría de colegiados.
Así mismo me gustaría solicitar vuestra asesoría sobre cómo defendernos como colegiados de la utilización política que del Colegio de Madrid está haciendo la actual Junta Directiva en favor de los postulados de un partido político y una ideología concreta, y cómo actuar para conseguir que el Colegio vuelva a ser la institución profesional, seria y solvente que trabaja con rigor en la defensa de los derechos y los intereses de profesionales y pacientes.
Atentamente,
José Manuel Díaz Olalla
Médico Colegiado

Pdta. Remito copia del presente correo a la Presidencia del Colegio por si fuera de su interés


CARTA 8.-
ENVIADA A LA PRESIDENTA DEL COLEGIO DE MÉDICOS RELATIVA AL TRIBUNAL DE EXCEPCIÓN POR ELLA CREADO Y A SU INFORME PERICIAL.
24 DE AGOSTO DE 2006
Madrid a 24 de Agosto de 2006
Estimada Presidenta:
consulto la página web del Colegio de Madrid por ver si mi Colegio tiene alguna postura oficial sobre la "purga" política que la Consejería de Sanidad de Madrid está realizando contra médicos compañeros que ejercen en el Hospital Severo Ochoa de Leganés. No encuentro nada. La última referencia a lo que acontece en ese centro es de Junio. Sin duda la Presidenta de mi Colegio y toda su Junta Directiva están de vacaciones. Me alegro por ellos. Pero la Consejería de Sanidad y sus comisarios políticos no lo están. Creo que si ellos no descansan la institución que nos representa y tiene que velar por defendernos tampoco debe hacerlo.
O mucho me equivoco o ninguna reacción ante este nuevo atropello saldrá de mi Colegio. Mi Colegio no se ha distinguido por defender los derechos de los colegiados en este caso. Al contrario, a mi modo de ver ha colaborado en todo lo que ha podido con la Consejería de Sanidad en dañar el prestigio y los derechos de médicos y pacientes de ese centro asistencial y de la Comunidad de Madrid. Nunca una administración sanitaria en nuestro país se había atrevido a tanto contra nuestra profesión, y nunca un Colegio Médico se atrevió a tan poco para defender los derechos de los colegiados.
Nada dirá ahora tampoco mi Presidenta ni mi Colegio. Le voy a explicar por qué, aunque todo lo que le voy a decir usted lo conozca mejor que yo: unos días antes de que se hiciera público (por usted) el resultado del informe de los expertos que usted a dedo nombró sobre el caso de las sedaciones habidas en ese centro, el Consejero Lamela era un auténtico "cadáver político". Le aseguro que sé de lo que le hablo. Hasta le habían hecho un hueco en el área de Hacienda para asgurarle que tras su cese inminente como Consejero encontratría algún lugar en el área de la que procedía (y de la que nunca debió salir, añado yo). Pero en eso aparece el informe de los expertos-nombrados-a dedo-por-la-Sra. Presidenta (un tribunal ad-hoc creado por usted a la medida de sus objetivos y saltándose a la torera el órgano colegial competente en esa materia) que, matices aparte, le sirve al Consejero Lamela de balón de oxígeno para superar el bache y, a falta de que nadie ni política ni técnicamente le da la razón en este largo contencioso, le sirve también de preciado clavo ardiendo al que agararrase para continuar en su cargo y seguir trabajando, con toda saña, contra ese hospital, los médicos madrileños, la sanidad pública y contra cualquiera que no piense como él ni se pliegue a sus arbitrariedades.
He leído que se ufanó en público el Consejero Lamela de este regalo que usted le hizo y que le sirvió para -¡por fín!- poder reivindicarse y justificar todos sus abusos en virtud de los resultados del informe de "los expertos"-nombrados-a-dedo-por-usted-a-la-medida-de-sus objetivos en este asunto. También leí que usted agradecía mucho el apoyo que había recibido de algunos presidentes de otros colegios provinciales que la apoyaron cuando el Presidente del Comité colegial de Deontología renunció a su cargo para denunciar sus manipulaciones. No está mal. A los médicos se nos ha acusado siempre de gremialismo. Sin embargo la presidenta de la asociación AVINESA (experta en querellarse contra médicos y en propalar infundios y denuncias anónimas contra ellos) se congratuló de que, por fin y gracias a usted, se hubiera acabado con el gremialismo médico. Es aquí donde creo que debería reflexionar sobre sus actuaciones, si no con otros argumentos, al menos con el de qué puede significar en realidad que la más notable participación suya en este caso haya sido reconocida y aplaudida nada menos, y prácticamente en exclusiva, por el Consejero Lamela y por la asociación anti-profesión médica por excelencia.
Leí también en esos días que usted reivindicaba la galanura y la sapiencia de los-expertos-nombrados-por-usted-a-dedo-a-la-medida-de-sus-objetivos e intereses. No me parece mal. Lo que ocurre es que sus expertos son los únicos que mantienen un determinado criterio que es, además, contrario al recogido en todos los informes de los demás expertos que hasta el momento se han pronunciado sobre el tema, como la Sociedad Española de Epidemiología, el Colegio de Peritos, la Clínica Forense de Madrid, o los Inspectores Médicos de la Comunidad de Madrid ¿O es que todos estos no le parecen a usted suficientemente "expertos"? Si se lo parecen ¿qué explicación puede darnos al hecho de que ninguno de ellos apreciara irregularidad ninguna en el trabajo de los compañeros represaliados y que tan sólo la apreciaran los expertos-nombrados-por-usted-a-dedo-y-a-la-medida-de-sus-objetivos en este tema?
La Señora ministra, a raíz de la difusión del informe del comité de "expertos"-nombrados-a-dedo-por-usted-etc, dijo algo que es incontrovertible: que otro comité de expertos (tan expertos como los suyos o algo más, añadiría yo) hubiera emitido, con criterios científicos y éticos, un informe totalmente diferente. De hecho eso ya ha ocurrido como le expongo más arriba. Entonces ¿por qué son los nombrados-a-dedo-por-usted-a-la-medida-etc los que más daño hacen al colectivo médico?
Porque Presidenta, y con esto termino y no la entretengo más, no se moleste si le digo que para la mayoría de los médicos de Madrid usted tiene sus propios objetivos e intereses en este asunto. Intereses y objetivos, como usted sabe, los hay de todas clases. Los de índole ideológica también lo son y no por corresponer a esa naturaleza de asuntos son más justificables que otros.
Intereses y objetivos que, según nos parece, no son coincidentes con los de la mayoría de nosotros. Y, a mi modo de ver, ellos han primado sobre su obligación de defender a los médicos y a los pacientes.
A pesar de todo yo creo ciegamente en su honradez y soy de los que están convencidos de que usted hace todo esto sin esperar ninguna recompensa a cambio. No sé si le preocupa, pero por si lo hiciera le recomiendo que considere que a quienes usted ayuda en este trance intentarán agradecérselo cuando convenga. Ellos siempre se han distinguido por eso. Es su código de valores: "Tú me ayudas aquí y yo mañana me acordaré de eso". Si tenemos suerte y vida todos lo veremos. Sin duda usted no entrará en ese juego pero a esas alturas ya nada nos sorprenderá.
He sido votante y entusiasta defensor de las bondades de su candidatura cuando se presentó para Presidenta del Colegio. Me confieso, por ello, profundamente arrepentido. Por muchas esperanzas que usted tenga depositadas en el futuro creo que no le habrá merecido la pena cuando comprenda que con todo ello tan sólo pasará a la pequeña historia de la profesión médica nacional como la persona que más hizo a favor de una administración sectaria y antimédica y en contra de los justos derechos de profesionales y pacientes.
Atentamente,
José Manuel Díaz Olalla
Médico Colegiado
Post-data.- Sra Fariñas, cuando me disponía a mandarle este indignado aunque respetuoso glosario de quejas muy justificadas cae en mis manos un periódico del día de ayer. En él figuran las declaraciones de un insigne prócer de la Patria, a la sazón diputado en la Asamblea de Madrid por el Partido Popular, quien "acosado" por los reproches de la oposición ante la "caza de brujas" desatada por la Consejería del Sr. Lamela en el Hospital Severo Ochoa declaró: (sic) ".... estas críticas proceden de la frustración que sienten ustedes tras descubrirse que hubo malas prácticas y gravísimas irregularidades en el Severo Ochoa".
¿Qué le parece la cita a mi Presidenta? Buena, ¿verdad?

Pues lo dicho, usted a seguir dándoles carnaza que ellos sabrán como acabar con nosotros.



CARTA 9 (Y ÚLTIMA).-
A LA PRESIDENTA DEL COLEGIO DE MÉDICOS DE MADRID EN RELACIÓN A LA SENTENCIA SOBRE EL CASO SEVERO OCHOA.
26 DE JUNIO DE 2007

Sra. Presidenta del Colegio de Médicos de Madrid


Madrid a 26 de junio de 2007


Estimada Sra. Fariñas:

Como no ignora, el pasado 22 de Junio el Juez Instructor del Juzgado nº 7 de Leganés decretó el sobreseimiento de la causa que mantenía abierta contra un grupo de médicos del Servicio de Urgencias del Hospital Severo Ochoa de Leganés. Según el Auto, el Juez no encuentra relación entre la actuación profesional de esos compañeros y el fallecimiento de los pacientes que habían tratado. Según nuestro ordenamiento jurídico, fundamentado en la presunción de inocencia y en que los delitos deben demostrarse con pruebas, esto significa que son inocentes.

Quizás le extrañe lo que antecede porque si no conociera la noticia y tan sólo hubiera leído y oído lo escrito y dicho por muchos medios de comunicación y por algunas autoridades de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid pensaría lo mismo que muchos españoles: que esos médicos son culpables.

¿Hace algo el Colegio de Médicos de Madrid por impedir que estos profesionales inocentes sigan siendo vilipendiados en plena plaza pública, aún después de la sentencia absolutoria? Evidentemente no. Yo preguntaría más: ¿cómo es posible, que a partir de una sentencia absolutoria tantos crean encontrar argumentos para seguir condenando a estos inocentes? ¿Lo sabe usted? Yo sí: la Señora Presidenta del Colegio de Médicos de Madrid les ha dado gratuitamente el argumento que nunca soñaron tener. La Sra. Fariñas creó un tribunal de excepción a dedo en función de sus intereses saltándose a la torera la jurisdicción ordinaria en materia ética y disciplinaria, que en la organización colegial es el Comité Deontológico. Como sin duda recuerda, el Presidente del dicho Comité, Dr. Casares, dimitió de su cargo para denunciar las manipulaciones que usted estaba cometiendo en este asunto.

Y fue ese órgano de supuestos expertos nombrados por usted el que, según su particular criterio, encontró algunos casos de supuesta mala praxis en la actuación de los compañeros, dictamen que ahora sirve para seguir criminalizándolos, y con el que nunca coincidieron los expertos ni las sociedades científicas médicas especializadas que estudiaron el caso, como el Colegio de Peritos, los Inspectores Médicos de la Comunidad de Madrid, la Sociedad Española de Epidemiología, las Clínicas Forenses, etc, los que siempre encontraron intachable la actuación de esos médicos.

De nada sirve que el Juez que archiva el caso no haya encontrado relación entre los supuestos casos de mala praxis y los graves hechos de que se les acusaba. El (ex?) Consejero Lamela, su entorno, y los corifeos extremistas que le secundan presentan la sentencia como un éxito de su ataque al colectivo médico y como una condena sin paliativos de los compañeros injustamente encausados gracias a la inestimable ayuda de la Sra. Fariñas. Se atreven a más, crecidos como están por el dictamen de su “comité de expertos”, y como son de los que te cogen el brazo cuando les das la mano, ya le están exigiendo otros peajes: que expediente, quizás que expulse de la profesión, a los compañeros que han resultado inocentes por los casos de supuesta mala praxis que nadie más que sus peritos a dedo han encontrado. Usted, al menos con ellos (la jauría fanática, su asociación predilecta AVINESA y otros acólitos), debería ser sincera por esta vez: dígales que por mucho que usted quisiera, y nadie duda a estas alturas que así fuera, nada puede hacer contra los médicos del Severo Ochoa porque la supuesta mala praxis sólo la ha encontrado el tribunal de excepción nombrado por usted a su gusto, y cuya validez es nula para la toma de medida disciplinaria alguna ya que carece de competencias para eso y para cualquier otra cosa en relación a la deontología y la ética profesional. Su dictamen, dígaselo con franqueza, solo vale para blanderlo contra unos compañeros inocentes y continuar su criminalización permanente, pero no sirve ni para llamarles al orden.

Somos muchos los que nunca vamos a olvidar cómo ha contribuido a este atropello ni lo que le ha hecho a esta profesión y a unos compañeros inocentes. Ahora que, según parece, pretende autoproclamarse presidenta vitalicia debe considerar que una gran parte de los médicos de Madrid y del resto de España recordaremos siempre cuál ha sido su intervención más importante en defensa de los derechos de los médicos y de los pacientes.

Atentamente,

José Manuel Díaz Olalla
Médico Colegiado
Madrid.